lunes, 2 de febrero de 2009

¡Al agua, ranas!


Aunque Ud. no lo crea, fue apenas en el mes de enero que ME fue bautizada. Escogió ser romana, católica y apostólica aunque le mola Krishna. Cada quien reacciona de manera distinta ante la presencia de lo divino. A nuestro ministro de la defensa le fallan las piernas y juega al monigote (se le da bien). Manuela Eugenia con el repique del agua bendita, arqueó las piernas y estuvo a punto de brincar como una rana. ¿Algún instinto que quedó grabado? ¿Algún antepasado anfibio? En todo caso aquí está el momento clave en el bautizo en donde, eso sí hay que decirlo, no lloró ni croó.

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